Según Platón, la oligarquía es:
«Una forma de gobierno donde el censo decide la condición de cada ciudadano; donde los ricos ejercen el mando, donde no tienen ninguna parte los pobres.»
-Platón, La República
La palabra censo en la antigüedad no refería únicamente al recuento de individuos que conforman una población, sino que tiene su origen en la censura, una magistratura de la Republica Romana que a demás de llevar el registro poblacional, escogía a los senadores, hacía el gasto de obra pública, ejercía la supervisión del Régimen Moral (Regimen Morum) y «valoraba» la clase social de cada persona para determinar sus impuestos. Por eso Platón dice que el censo decide la condición de cada ciudadano, pero a este determinante aún hay que añadirle que solo los ricos ejercen el mando; es decir, en una oligarquía los ricos tienen control sobre la política, el gasto de recursos públicos, la tasa de impuestos, la moral de las masas y la división de las clases sociales, en consecuencia, los pobres no tienen poder.
Según la lista anual de Forbes, en 2021 los cuatro hombres más ricos de México eran: Carlos Slim, Germán Larrea, Ricardo Salinas y Alberto Bailléres. Juntos acaparaban el 9% del PIB mexicano en 2014, y los cuatro tienen en común que se han enriquecido a partir de sectores económicos concesionados y/o regulados por el Estado, haciendo uso del enorme capital que les heredaron sus padres.

Carlos Slim Helú
Su riqueza puede ser rastreada hasta los tiempos de la Revolución Mexicana, cuando su padre extranjero era dueño de un negocio llamado «La Estrella del Oriente». Durante su juventud invirtió en distintos negocios y bienes raíces, que le acumularon suficiente capital para adquirir empresas como la minera Frisco, Seguros de México y otras, en la crisis de los ochenta. Su mayor golpe de suerte llegó durante las privatizaciones del sexenio de Salinas de Gortari, cuando se le concedió comprar el 53% de las acciones de Teléfonos de México (TELMEX) a pagos paulatinos con ganancias de la propia empresa, al final Slim pudo comprar el resto de las acciones al Estado y los otros socios minoritarios.
Su empresa, Grupo Carso, se ha mantenido varias décadas en el top 10 empresas más importantes que publica Expansión. Ha recibido multiples contratos del gobierno para construir obras públicas, entre las que destaco la Línea 12 del metro de la Ciudad de México, que el 05 de mayo de 2021 se desplomó dejando 27 muertos en las vías que transportan a la clase trabajadora residente en la periferia de la ciudad; el primer peritaje preliminar de la empresa noruega Det Norske Veritas señala que la tragedia fue ocasionada por «una falla estructural» ajena a los diseños de los planos. Este incidente ha puesto en duda la cantidad de contratos que obtiene esta empresa del Estado.
La minera Frisco, adquirida en los ochenta por el actual hombre más rico de México, tampoco escapa de tropelías, pues desde 2019 una comunidad indígena chiapaneca demanda el cierre de una de sus instalaciones. Durante una manifestación denunciaron haber sufrido la expulsion de sus tierras, violencia contra las mujeres y microsismos cuando usan explosivos. La minera sigue operando impunemente, extrayendo riqueza del saqueo a los pueblos originarios que viven marginados por el Estado.
Carlos Slim ha sido es justamente criticado por su cercanía ininterrumpida con el poder en últimas décadas, su presencia junto al presidente de cada sexenio en las fotografías, ya sean de «izquierda» o «derecha», despierta la terrible sospecha de que a pesar de que los políticos rotan, los oligarcas prevalecen a los terremotos en la democracia capitalista.
Familia Larrea
Germán Larrea trató de mantenerse lejos del ojo público, hasta que el 9 de septiembre de 2014 tuvo que mostrar su rostro en una reunión de Banamex. En estas primeras fotografías aparece estrechándole la mano a Enrique Peña Nieto, tan solo un mes después de que la mina Buenavista del Cobre (de Grupo México) provocara el peor desastre ecológico en la historia del país. Cuarenta mil metros cúbicos de lixiviados de sulfato de cobre fueron derramados en los ríos Bacanuchi y Sonora; SEMARNAT responsabilizó a Grupo México, cuya división minera es la más grande del país gracias a concesiones de explotación proporcionalmente grandes.
El nombre de esta mina podrá no decirle mucho al lector, pero quizá esta circunstancia cambie si les digo que antes se llamaba Cananea, mina que es famosa por haber sido escenario de una valiente huelga obrera que callaron a punta de sangre y fuego. Ahora sus dueños tienen esa y otras muchas minas de las que se benefician; destaco la mina 8 de la Unidad Pasta de Conchos, en Coahuila, donde en febrero de 2006 se registró una explosión que dejó sepultados a 65 obreros, cuyos cuerpos siguen sepultados. Se habían reportado fallas en la seguridad de la mina desde el año 2000.
A punta de sangre y fuego, los padres de hombres y mujeres que murieron en la revolución construyeron las redes ferroviarias mexicanas, y en charola de plata le entregaron a Ferromex la concesión para su explotación durante 50 años a partir de 1998. Esta empresa es la división de transportes del conglomerado Grupo México.
El director ejecutivo del conglomerado es el oligarca Germán Larrea, aunque según el índice de millonarios de Bloomberg, la accionista mayoritaria es su madre, Sara Mota de Larrea, quién es la mujer más rica del país.
En el contexto de las elecciones presidenciales de 2018, Grupo México tuvo el descaro de emitir una carta firmada por Germán en la que comparaba al proyecto de gobierno de AMLO con el de Venezuela, Argentina, Cuba y la Unión Soviética, incluso recomendaba tomar medidas en el cuidado del gasto familiar como precaución en caso de que ganara el candidato.
«Nadie nos ha regalado nada, esto se ha logrado gracias al esfuerzo de todos y cada uno de nosotros. El término «concesión» no es sinónimo de corrupción ni de compadrazgo como se ha insinuado recientemente.
Como empresario, creo en un modelo capitalista de libre mercado con un alto contenido de RESPOSABILIDAD SOCIAL, como único modelo viable para generar bienestar y crecimiento.»
-Germán Larrea en su carta, un día que tuvo los huevos de escribir «responsabilidad social» con mayúscula en referencia a Grupo México, y «nadie nos ha regalado nada» cuando su única virtud es haber heredado un chingo de capital de sus padres.
Ricardo Salinas Pliego
A diferencia de los Larrea, Salinas Pliego es un oligarca que se mantiene constantemente en el ojo de la opinión pública. En su Twitter hace comentarios clasistas tan desafortunados que es difícil aceptar que es realmente él quien los escribe.
«La desigualdad…no sólo es inevitable sino es necesaria para el progreso de la sociedad! Los intentos de transformar a la sociedad para que todos “encajen en el mismo molde” inevitablemente nos llevaran a la TIRANÍA.»
-Twitteó Salinas Pliego, el tercer hombre más rico de México, la Noche Buena del 2021.
Grupo Salinas tiene su origen en una fábrica de muebles fundada por el bisabuelo de Salinas Pliego en la primera década del siglo XX, su abuelo dio un giro a la empresa, pasó a llamarse Elektra y comenzó a ventar artículos de línea blanca y electrónicos, más tarde, su padre expandió el negocio a todo el país.
El negocio de Elektra es vender a crédito en pagos chiquitos, por lo que, al final se termina pagando mucho más por el producto y los costos de no pagar a tiempo son caros para la clase trabajadora. En 2015, la empresa vendió uno de cada cinco refrigeradores, uno de cada cuatro televisores y siete de cada diez motocicletas. Durante la pandemia de Covid-19, recibió quejas de sus trabajadores por las malas condiciones de seguridad a las que fueron sometidos, a demás muchos de sus deudores dejaron de pagar por la crisis económica y sus deudas aumentaron drásticamente, lo que empeoró aún más su condición de vulnerabilidad. Por otro lado, la crisis no afectó a la empresa, que a 3 de enero de 2022 aumentó su cotización en la bolsa de valores un 12% con respecto al mismo periodo en 2020.
Según Raquel Buenrostro, titular del SAT, Grupo Salinas debe unos 40 mil millones de pesos en impuestos. Ricardo se ha negado a pagar su deuda, enviando todo a tribunales. Tras uno de sus tuits irreverentes, dio la siguiente respuesta cuando le cuestionaron al respecto:
Como buen oligarca, Salinas Pliego es un parásito del Estado. En 1993 encabezó la compra del paquete de medios privatizado por el gobierno de Salinas de Gortari, así nació TV Azteca, que pronto se convirtió en la segunda productora televisiva en habla hispana más grande del mundo. Según datos revelados por el Inai, durante el sexenio de Peña Nieto cinco empresas concentraron el 34% del gasto total en publicidad oficial, la más beneficiada fue Televisa (en cuyo consejo administración estaba Germán Larrea), la segunda empresa más beneficiada fue TV Azteca. Ambos medios tienen fama de ponerse al servicio de los intereses de los poderosos y tomar partido por el neoliberalismo ¿Cómo no van a ser laxos con los gobiernos cercanos a la oligarquía si sus altos cargos son la propia oligarquía?
AMLO le está dando menos «chayote» a los medios y está persiguiendo que Salinas pague sus impuestos completos, pero no se salva de colaborar con el oligarca. Los apoyos sociales que se dan en tarjetas de Bienestar se hacen a traves de Banco Azteca, que en 2019 obtuvo por lo menos 300 millones de pesos por manejar dinero que está destinado a reducir la pobreza, a demás el contrato permite a Banco Azteca analizar la base de datos de los beneficiados y cobrarle a quienes le deban a Elektra.
A pesar de sus deudas con el Estado y su nefasto comportamiento, el oligarca forma parte del grupo de asesores económicos del actual gobierno federal.
Una situación injusta e insostenible
Mucho se habla de lo pésimo e insuficiente que es el sistema educativo y de salud que provee el Estado, pero poco sobre que no se obtiene la suficiente recaudación para hacer todo el gasto público que se requiere. Los voceros del capital dicen que es porque la mayor parte de la fuerza productiva mexicana trabaja en la informalidad y no pagan impuestos, pero los 40 mil millones de pesos que le debe Salinas Pliego al SAT apuntan en la dirección opuesta.
Entre 2013 y 2015, el top 0.001% más rico del país pagó una tasa de impuestos de 11.3%, lejos del 35% que por ley se les debería cobrar. De hecho, pagan menos que el top 0.1% (sin contar el 0.01%), que en ese mismo periodo pagaron una tasa de impuestos de 20.9%. La maneras en las que consiguen pagar menos de lo que deberían son diversas, pero se puede resumir a que tienen acceso a bufetes de contadores de primer nivel que consiguen eludir sus impuestos legalmente.
«Democracia Capitalista» es un eufemismo de «Oligarquía» porque se pone la política, el gasto de recursos públicos, la tasa de impuestos, la moral de las masas y la división de las clases sociales, al servicio de los más ricos.
«El gobierno se hace democrático cuando los pobres, consiguiendo la victoria sobre los ricos, asesinan a unos, expulsan a otros y se reparten por igual con los que quedan los cargos de la administración»
-Platón, La República (sobre la transición de la oligarquía a la democracia)
Autor: Rolando Ramos Cardona